Un grupo de 14 diputados en el parlamento marroquí, todos ellos de origen saharaui, criticaron en un comunicado conjunto el reciente juicio militar a 25 saharauis por los llamados "sucesos de Gdaim Izik", que se saldó con condenas de entre 20 años y la perpetuidad para 23 de ellos.
En aquel juicio, que terminó el pasado 16 de febrero, se procesó a los saharauis por su implicación en los violentos sucesos que siguieron al desalojo del campamento de Gdaim Izik en noviembre de 2010, que causaron la muerte de once agentes marroquíes y dos civiles saharauis.
En su comunicado, los 14 diputados de todos los grupos parlamentarios consideraron que el tribunal militar que condenó a los 25 independentistas saharauis -uno de ellos en rebeldía- no ha sido la instancia "adecuada" para juzgar a civiles, por lo que subrayan "la necesidad de hacer justicia ante un tribunal civil".
Los parlamentarios criticaron igualmente la ausencia de "pruebas tajantes" contra los condenados, y por ello consideraron que solo las confesiones que hicieron ante la Policía Judicial -que luego fueron negadas ante el tribunal- "no justifica en absoluto las duras sentencias" del tribunal militar.
Por otra parte, los parlamentarios reprobaron la cobertura de algunos medios de la prensa marroquí del proceso, que según ellos "incitaron a la xenofobia y el racismo" (supuestamente anti saharaui) al carecer "de toda imparcialidad y profesionalismo".
Asimismo, parlamentarios expresaron su sorpresa ante el apoyo que mostraron "algunas personalidades públicas a una parte contra otra" refiriéndose a la presencia de tres ministros marroquíes frente al tribunal durante el proceso donde se fotografiaron junto a familiares de las víctimas marroquíes.
La diputada Gachmula Bint Abbi, una de los firmantes del comunicado, dijo a Efe que los diputados firmantes -que representan a siete partidos marroquíes de distintas tendencias- no quisieron hacer comentarios o declaraciones durante el proceso celebrado el mes pasado para "no interferir en el curso de la justicia".
Sin embargo, al conocerse las duras condenas "no podíamos quedarnos al margen", subrayó la diputada, que pese a alinearse con las tesis de la marroquinidad del Sáhara, ha expresado en el pasado varias críticas sobre la gestión que el gobierno de Rabat hace de los asuntos saharauis.
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